La falta de atención
es uno de los problemas más habituales que dificultan el aprendizaje y nosotras
las maestras estamos muy preocupadas porque se dispersan rápidamente.
Para ello es necesario
trabajar con los padres en casa, por
ejemplo ellos podrían ayudarnos así:
- Enumerar tres, cuatro o cinco cosas (según la edad) que puede encontrar en casa y pedirle que las traiga para comprobar que ha atendido al listado. Por ejemplo:
- Corta la figura, pega en el cuaderno azul, los papeles echas a la basura y guardas las tijeras.
- Carlos trae tu pantalón azul, el polo blanco, las zapatillas para lavarlas.
- En la tienda compra un paquete de galletas, tarro de leche, una cocoa y una lata de atún.
- El niño puede guardar varios
objetos en una caja, cerrarla y pedirle que repita el nombre de todos los
objetos que están en su interior.
- Observar la vestimenta de los
miembros de su familia y preguntarle por ejemplo con que color de pantalón
está el papá.
- Que resuelva pupiletras del periódico, que encuentre diferencias etc.
Hay que tener en cuenta lo que
señala el psicopedagogo Juan Vaello Orts, autor, del libro Cómo dar clase a los que no quieren, “considera que en el ámbito
escolar se distinguen dos tipos de atención: la del alumnado, que debe ser
concentrada en torno a la tarea o al profesor, y la del docente, que debe
distribuirse entre todos los estudiantes por igual. Vaello apunta diferentes estrategias
para captar la atención y para mantenerla:
·
Asegurar la atención de todos los alumnos y no
comenzar la clase hasta haberlo conseguido.
·
Advertir al alumno distraído de manera individual,
llamarle por su nombre. Si este paso es ineficaz, conviene hacer una
advertencia personal privada.
·
Detectar los elementos que pueden distraer a los
estudiantes e intentar anularlos.
·
Colocar a los alumnos de menor rendimiento más cerca
del docente.
·
Iniciar la clase con actividades que favorezcan la
atención, como preguntas breves sobre la clase anterior o ejercicios prácticos.
·
Utilizar distintas formas de presentación de los
contenidos de la materia, como lecturas, videos, etc. Variar las tareas que
deben realizar los estudiantes para evitar la monotonía.
·
Detectar cuáles son las metodologías que consiguen un
mayor nivel de atención en los alumnos y utilizarlas en los momentos claves,
como al final de la clase, cuando están, en general, más cansados”
Otros ejercicios para
mejorar la atención de nuestros alumnos son:
- Detectar diferencias
- Detectar semejanzas
- Sopa de letras
- Laberintos
- Seriaciones
Ejemplos:
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En este enlace encontrarás diferentes
actividades que te ayudarán a mejorar la atención en el aula, te invito a que
lo pongas en práctica de acuerdo al grado en que se encuentren tus niños.
Recuerda: Maestr@ trabajar las actividades anteriores previamente con
material concreto.
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